miércoles, 14 de mayo de 2008

Cabellos al sol

El cabello, del mismo modo que la piel, requiere protección y cuidados frente a la acción de los rayos de sol.
El sol posee la capacidad de aclarar el cabello y crear sutiles reflejos en rubios y castaños muy naturales y favorecedores, sin embargo, puede alterar el tono de los cabellos teñidos e inclusive llegar a quemar el pelo, resecarlo en exceso, debilitarlo y tornarlo poroso.

LAS AGRESIONES QUE SUFRE EL CABELLO EN PRIMAVERA Y VERANO

Con la llegada del buen tiempo, el cabello se expone al agua, la sal del mar, la arena y el cloro, además de a la acción de los rayos del sol. Todos estos factores se unen y pueden llegar a repercutir gravemente en la salud y belleza del cabello.

Los rayos ultravioleta afectan a la fibra capilar de varias formas. En la superficie, eliminan la capa de grasa que protege el cabello, resecándolo y tornándolo áspero y sin brillo. A medida que los UV se adentran en capas más profundas, debilitan el pelo, lo vuelven poroso y llegan a conseguir que el cabello se rompa, se abra en las puntas y se decolore.

Por otra parte, el agua es otro enemigo de un cabello sano y bonito, pues al estar mojado se multiplican las agresiones del sol y se favorece la deshidratación.
El cloro de las piscinas despigmenta el cabello y decolora los tintes, lo que puede provocar reflejos verdosos en rubios y reflejos rosados en caobas.

MÁXIMA PROTECCIÓN Y CUIDADOS PREVENTIVOS

La prevención es la mejor forma de mantener el cabello sano y bonito en verano. Por ello es necesario lavarlo tras cada jornada con un champú específico para después del sol que conseguirá eliminar todos los restos de sal, cloro o arena.
Al tratarse de una época de lavados frecuentes, no conviene enjabonar el cabello dos veces ni efectuar fricciones enérgicas, pero sí aclarar en profundidad con abundante agua para asegurar la completa eliminación de residuos.

Después debe aplicarse un acondicionador adecuado al tipo de cabello y aplicar un par de veces por semana una mascarilla nutritiva.

¡Atención al secado!

El uso repetido e inapropiado del secador es una de las principales causas de la sequedad excesiva del cabello. Lo ideal es utilizar este aparato lo menos posible y emplear cosméticos de acabado capilar como los geles con protector solar, espumas de tratamiento, serums antiencrespamiento y ceras para dar forma.
Si es necesario utilizar el secador, tras eliminar suavemente el exceso de agua con una toalla, coloca la salida de aire a una distancia prudencial del cabello y no te centres demasiado en una zona.
Además, usa productos termoprotectores para aplicarlos antes de usar el secador. Protegerán el cabello de la agresión del calor. Infórmate en tu peluquería.

Consejo
Evita la pérdida de color de los cabellos teñidos, aplicando un filtro solar antes de exponerlos al sol. Las nuevas versiones ofrecen una textura ligera de efecto invisible que protegen el cabello eficazmente, sellan la cutícula y aportan brillo. Consulta en tu peluquería el que más le conviene a tu tipo de cabello.

No hay comentarios: